Boca derrotó a Independiente por 3 a 1 y ratificó su paternidad ante el rojo.
El clásico fue emotivo, los dos equipos salieron a llevarse por encima al rival, ambas instituciones buscaron el triunfo, Boca para acercarse a la punta y el rojo para escaparse.
Independiente pegó primero, a los cuatro minutos de la primera parte se puso en ventaja, luego de una excelente jugada; el rengo Díaz metió un pase en profundidad para el Rolfi, el mediocampista ofensivo tocó el balón con zurda, la pelota pasó por toda la defensa de Boca y Dennis aprovechó el yerro de la defensa Xeneize para abrir la cuenta para el local. Luego del gol el rojo tuvo un pasaje que domino el encuentro, pero Boca emparejò el partido y llegó el gol en contra de Rodriguez que le permitió al conjunto dirigido por Miguel Ángel Russo empatar el cotejo.
Un goleador de la talla de Palermo aparece en estas instancias cuando el equipo necesita de un triunfo para pelear el campeonato. Un centro proveniente desde la derecha, Martín ejecutó un soberbio cabezazo con el parietal izquierdo, la pelota se incrustó en el rincón de las ánimas, donde ni tres Asman juntos pueden llegar.
El segundo tiempo siguió siendo intenso. Cuando atacaba el rojo aparecía Caranta para salvar a Boca, pero el Xeneize jugaba mejor como equipo. Apareció la figurita que tanto quería Russo, Leandro Gracian recibe un pase de Banega en el mediocampo, el mediocampista ofensivo avanzó con pelota dominada, la defensa de Independiente dejó un espacio importante ya que estaba buscando el empate. El tano hizo una jugada magnifica dejando mal parada a la defensa del rojo y esquivó con gran habilidad al guardavalla del diablo de Avellaneda y anotó el 3 a 1.
Más tarde el rojo descontó y puso un poco de dramatismo al encuentro. Boca ganó y jugó un partidazo, a lo Boca. Como contra Libertad y Gremio en la Libertadores 2007, el equipo tenía que aparecer para no perderle pisada al puntero. Apoyado por el estupendo partido de Ibarra, jugador que merece ser titular de la Selección Argentina; Palermo jugó un partido interesante al igual que Battaglia y Palacio. El Xeneize ratificó su paternidad ante el rojo y con relación al futuro destaco las palabras de nuestro entrenador luego del final del clásico « VAMOS BOCA CARAJO».
El clásico fue emotivo, los dos equipos salieron a llevarse por encima al rival, ambas instituciones buscaron el triunfo, Boca para acercarse a la punta y el rojo para escaparse.
Independiente pegó primero, a los cuatro minutos de la primera parte se puso en ventaja, luego de una excelente jugada; el rengo Díaz metió un pase en profundidad para el Rolfi, el mediocampista ofensivo tocó el balón con zurda, la pelota pasó por toda la defensa de Boca y Dennis aprovechó el yerro de la defensa Xeneize para abrir la cuenta para el local. Luego del gol el rojo tuvo un pasaje que domino el encuentro, pero Boca emparejò el partido y llegó el gol en contra de Rodriguez que le permitió al conjunto dirigido por Miguel Ángel Russo empatar el cotejo.
Un goleador de la talla de Palermo aparece en estas instancias cuando el equipo necesita de un triunfo para pelear el campeonato. Un centro proveniente desde la derecha, Martín ejecutó un soberbio cabezazo con el parietal izquierdo, la pelota se incrustó en el rincón de las ánimas, donde ni tres Asman juntos pueden llegar.
El segundo tiempo siguió siendo intenso. Cuando atacaba el rojo aparecía Caranta para salvar a Boca, pero el Xeneize jugaba mejor como equipo. Apareció la figurita que tanto quería Russo, Leandro Gracian recibe un pase de Banega en el mediocampo, el mediocampista ofensivo avanzó con pelota dominada, la defensa de Independiente dejó un espacio importante ya que estaba buscando el empate. El tano hizo una jugada magnifica dejando mal parada a la defensa del rojo y esquivó con gran habilidad al guardavalla del diablo de Avellaneda y anotó el 3 a 1.
Más tarde el rojo descontó y puso un poco de dramatismo al encuentro. Boca ganó y jugó un partidazo, a lo Boca. Como contra Libertad y Gremio en la Libertadores 2007, el equipo tenía que aparecer para no perderle pisada al puntero. Apoyado por el estupendo partido de Ibarra, jugador que merece ser titular de la Selección Argentina; Palermo jugó un partido interesante al igual que Battaglia y Palacio. El Xeneize ratificó su paternidad ante el rojo y con relación al futuro destaco las palabras de nuestro entrenador luego del final del clásico « VAMOS BOCA CARAJO».
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