Bochornoso

Boca fue derrotado por el Milán por 4 a 2. El Xeneize jugó un segundo tiempo bochornoso, para olvidarlo rápido.
Boquita jugó un excelente primer tiempo, apoyado por la dupla central (Maidana – Paletta) y Battaglia, que lograron neutralizar a Kakà, y Palacio volvió loco a toda la defensa del Milan.
El conjunto Italiano se mostró timorato y sin ideas, estaba todo controlado, hasta que comenzaron los segundos cuarenta y cinco minutos, y Boca perdió la brújula y tiró por la borda todo el excelente trabajo de la primera etapa. El Milan comenzó a dominar la pelota en el mediocampo y Kakà comenzó a tener mayor protagonismo. La calidad del brasilero fue un factor determinante para la definición del cotejo.
Boca jugó un segundo tiempo realmente bochornoso. En la era Bianchi al contrario le costaba un triunfo pasar a la defensa Xeneize, algo parecido pasaba bajo la conducción de Basile, y en menor proporción en la última Copa Libertadores lograda por éste equipo hace cinco meses. Ayer ocurrió todo lo contrario, el Milan entró por todos lados, llegó cinco veces en todo el partido y metió cuatro goles, el conjunto Italiano se hacía un picnic en ataque, atacaba por derecha, por izquierda, hasta por el medio, lo de Boca realmente bochornoso.
Muchos resaltan la producción de Boca en el primer tiempo, lo cual es real, pero no puedo dejar pasar por alto el mal segundo tiempo del equipo dirigido por Miguel Ángel Russo, entrenador que está en duda su futuro en la institución.
Russo tuvo su parte de responsabilidad, Ibarra no podía seguir jugando, pero como el entrenador como no sabía como rearmar el equipo y decidió no suplantar el lateral derecho, Boca regaló el sector del negro Ibarra y Kakà lo aprovechó a la perfección.
Con Russo o sin Russo el operativo retorno a Japón está en marcha.