martes, 17 de julio de 2007

J.R que jugador por favor, es lejos el futbolista mas importante desde el 97, año que se retiro Diego.
Ver a jugar a Riquelme es llenarse los ojos de fútbol, si no que lo diga Mario Yepes, que se comió el caño más hermosos y espectacular que se vio en todo el mundo.
El doctor Bilardo tuvo un ojo de novela. En un partido frente a Unión hizo debutar a la última maravilla del fútbol argentino y le dijo« pibe, vos hace lo que sabes que todos lo van a marcar a La Torre», Román la rompió y a partir de ese día nació una verdadera joya.

Román tiene la virtud de tener la pelota, en él descansa el juego, acomoda el cuerpo y es un tiro libre a su favor, hoy en día que todos los partidos se definen con pelota parada. Riquelme es el conductor que necesita cualquier equipo, hace jugar a todos los futbolistas y en cualquier momento coloca un pase magistral para dejar al delantero mano a mano con el arquero.

Cuando Bianchi se hizo cargo de la dirección técnica de Boca, Román brillo, lucio y enamoró a todos los simpatizantes boquenses y porque no al mundo entero, ya que jugó tres Copas Libertadores en un nivel superlativo.

Román pasó al Barcelona pero no pudo demostrar su brillante juego por la pésima dedición de uno de los peores entrenadores del fútbol mundial, Luís Van Gall. Román fichó con un club humilde como el Villareal. En el submarino amarillo J.R hizo historia, ya que con su talento llevo al equipo español a disputar la Champion League, torneo en que nunca dicho club pudo participar.
El gran momento de Riquelme en Boca, le permitió jugar el mundial sub. 20, torneo que la Argentina ganó sin problemas. El entrenador era José Pekerman y Riquelme brilló con él. Con el paso del tiempo al técnico se le mezclaron los cables y no hizo lucir a Román, que con su talento se las ingenio para mostrar algo de su talento en el mundial de Alemania 2006.
El Villareal llegó a la semifinal del torneo más importante de Europa y Riquelme se convirtió un ídolo para los hinchas del submarino amarillo.

Mas tarde, el hombre, Mauricio Macri, rompe el chanchito y Román retorna a Boca para triunfar y ser el mejor medicampista ofensivo del mundo, si señor y a llorar atrás de la iglesia.

En la Copa América que volvimos a perder con Brasil, Riquelme fue el único jugador que se salvo del incendio, junto con Messi, Mascherano y Tevez. Román en el primer partido metió tres pases de los cuatro goles que hizo el equipo Argentino frente a Ecuador. Román enseñó a los yanquis como ejecutar un tiro libre y a los Mexicanos les demostró como se juega al fútbol y si nos ponemos a pensar un poco más en frío, contra Brasil fue el jugador más peligroso del seleccionado Argentino, en sus pies tuvo dos chances, una el palo devolvió un potente remate del 10 y guardavalla despejó un tiro interesante del mediocampista.
Señores, a sacarse el sombrero, Román es un estupendo jugador, con una calidad única en el mundo, su juego me hace recordar al jugador más interesante que observé en mi vida, luego de Diego, Zinedine Zidane. Riquelme tiene una calidad parecida al francés, y por supuesto lo resentidos de siempre, las gallinas, la academia, los cuervos y los del rojo son los que lo critican. Pero bueno se quedarán con Aimar, con Montenegro, con el mago Capria y con el pipi Romagnolli, que ni siquiera saben lo que es una Libertadores y un viaje a Japón.

No hay comentarios: